Elmgreen y Dragset han trabajado juntos desde 1995 y su práctica surge de varias disciplinas, a menudo incorporando crítica institucional, política social, performance y arquitectura en el contenido de su trabajo. En el 2001 los artistas crearon una intervención-instalación en la Tanya Bonakdar Gallery en la ciudad de Nueva York llamada Opening Soon / Powerless Structures, Fig. 242 [Próxima apertura / Estructuras imponentes, fig. 242]. En esta obra, los artistas cubrieron las ventanas de la fachada de la galería e instalaron un gran cartel anunciando que Prada abriría una nueva tienda en ese lugar. Opening Soon / Powerless Structures, Fig. 242 fue un comentario juguetón sobre cómo las galerías de arte han contribuido al proceso de gentrificación en las zonas urbanas. La parodia llamó la atención de Yvonne Force Villareal y Doreen Remen, fundadoras del Art Production Fund, quienes eventualmente se unieron a los artistas para realizar Prada Marfa.

Elmgreen y Dragset les presentaron a Force y Remen una propuesta simple y cautivadora “para colocar, de forma permanente, un modelo de tamaño real de una boutique de Prada en medio del desierto de Nevada». Originalmente, la obra debía llamarse Prada Nevada. El dúo, en el mismo espíritu de sus otras instalaciones, recrearía y desplazaría a los significantes comunes, causando una experiencia paradójica para los espectadores. Después de que Nevada había sido descartado como un sitio para la escultura, el APF contactó a las fundadoras de Ballroom Fairfax Dorn y Virginia Lebermann para que trabajaran juntos en traer Prada Marfa al Oeste de Texas.

Prada Marfa es una reconstrucción hiperrealista de una tienda de Prada, que se encuentra en el lado sur de la carretera US 90 a las afueras de Valentine, Texas, en el vasto desierto de Chihuahua. La escultura en sí es un edificio de adobe cubierto de estuco blanco. La puerta está cerrada herméticamente y niega la entrada a los visitantes así como cualquier oportunidad de intercambio comercial. En su totalidad, tanto en su interior como exterior, Prada Marfa es una escultura minimalista. Está compuesta por formas simples y rectilíneas. Las líneas horizontales que conforman la fachada delantera y el interior de la escultura acentúan y están en paralelo con las líneas amplias y expansivas del horizonte del Oeste de Texas.

En el interior, tres estantes longitudinales, que están empotrados en la pared y en paralelo con paneles de vidrio, evocan las obras minimalistas de Donald Judd. Los estantes almacenan veinte zapatos, cada uno de tacón alto y cada uno para el pie derecho. Los bolsos de mano de Prada descansan sobre dos pedestales bajos. Por la noche, cuando la escultura está espléndidamente iluminada por dentro, el interior de color verde pistacho irradia hacia el oscuro tramo de la carretera de Texas, una imagen evocativa del rico folclor extraterrestre de la región o de la obra de Dan Flavin en la cercana Fundación Chinati.

Ballroom y el APF empezaron la construcción de Prada Marfa a principios del 2005 y abrieron el sitio de la escultura el otoño del mismo año. Boyd Elder fue elegido representante in situ y supervisó el proyecto hasta que tristemente nos dejó en el 2018. Boyd residió en Valentine durante toda su vida; es una leyenda de la región del Big Bend y su nombre aparece al lado de Mick Jagger, Joe Walsh y Joni Mitchell. Boyd también era un artista y realizó el arte para varias de las portadas de discos de The Eagles. Lee este artículo en la revista Texas Monthly sobre el ícono del Oeste de Texas.

La idea errónea de que Prada Marfa se confunde con una boutique de Prada operacional proviene de las propias contribuciones de Miuccia Prada a la escultura. Cuando Elmgreen y Dragset usaron el logotipo de Prada en Opening Soon / Powerless Structures, Fig. 242 en la Tanya Bonakdar Gallery, el dúo no pidió permiso debido a la corta duración de la instalación.

Como la obra Prada Marfa iba a durar más tiempo, Elmgreen y Dragset se comunicaron con la marca para pedir permiso. No sólo aceptó, sino que la propia Miuccia Prada curó la mercancía para la escultura, escogiendo de la colección Otoño Invierno 2005 para que combinara con los tonos arenosos y terrosos del entorno circundante. La compañía también proporcionó información sobre el diseño corporativo, desde los colores de la pintura hasta la alfombra.

Aunque Prada contribuyó a la construcción de la escultura, Elmgreen y Dragset, Ballroom y el APF sostienen que la obra no es propaganda ni promoción de la marca. Elmgreen, al hacer la distinción entre el arte y la publicidad, afirma que “Fue una situación diferente a que si Prada les hubiera comisionado un proyecto, porque entonces hubiera sido un evento promocional; para nosotros fue algo que se nos ocurrió porque pensamos, ¿cómo se verían realmente estas tiendas de artículos lujosos si fueran extraídas de su contexto normal?”

Todos los involucrados en el proyecto tuvieron que defender la integridad de Prada Marfa como arte en el 2013 cuando el Departamento de Transporte de Texas (TX DoT) alegó que la escultura era un anuncio ilegal en la carretera. La controversia surgió con la construcción de otra instalación al costado del mismo tramo de la carretera US 90, comisionada por Playboy Enterprises. La instalación consistió en una escultura del distintivo logotipo del conejito de Playboy en la parte superior de un poste alto, que se elevaba a 12.2 metros por encima de un Dodge Charger 1972 pintado en aerosol negro. El automóvil estaba situado sobre una plataforma de concreto que imitaba la estética de las 15 obras sin título, también de concreto, de Donald Judd instaladas en la vecina Fundación Chinati. Esta atracción del borde de la carretera fue diseñada por el artista Richard Phillips y comisionada como parte de un intento de revivir la marca para una generación más joven.

La instalación de Playboy pronto fue declarada publicidad exterior ilegal después de que un residente y artista local presentó una demanda contra el conejito de neón de 12.2 metros de altura. Los miembros de la comunidad no sólo estaban molestos porque la escultura promovía la pornografía, sino también por su apropiación flagrante de las obras de concreto instaladas por Judd en la Fundación Chinati.

A Playboy se le concedió un periodo de cuarenta y cinco días para que quitara la instalación bajo el argumento de que no tenía una licencia de publicidad exterior. Playboy llevó el caso ante los tribunales, un tema polémico que también puso a Prada Marfa en la mira. Después de ocho años de existencia, TX DoT declaró que la escultura de Elmgreen y Dragset también era un anuncio ilegal al costado de la carretera y que Ballroom no tenía los permisos necesarios para que la escultura estuviera en su ubicación actual.

Finalmente, después de un año de negociaciones, Ballroom recibió el permiso necesario. Para que la escultura pudiera permanecer ahí, Prada Marfa recibió el estatus de museo, con el edificio como su única exposición de arte. Ballroom también adquirió nuevos contratos de arrendamiento para la propiedad en la que la escultura se encuentra. Ahora, bajo las leyes estatales, la señalización en el edificio se considera “un letrero en las instalaciones del museo” y no requiere un permiso estatal según la Ley de Embellecimiento de Carreteras.

Prada Marfa se construyó con adobe para que se pudriera, de forma natural, con el tiempo, pero la intención efímera de los artistas se replanteó rápidamente. El 12 de enero del 2005, sólo dos días después de que la obra tuviera su inauguración formal, la escultura fue vandalizada y robada. La obra fue pintada con aerosol, sufrió balazos, la puerta fue arrancada con una cadena y una camioneta, y la mercancía fue robada.

Ballroom, el APF y los artistas decidieron reparar la escultura. La restauración de la escultura se justificó porque el vandalismo se consideró prematuro y muy pocas personas habían visto la obra en su estado original. Prada donó seis bolsos nuevos idénticos y los zapatos del pie derecho salieron de sus cajas para ser exhibidos en lugar de los anteriores zapatos del pie izquierdo. Para desalentar aún más un futuro robo, se cortaron hoyos en la parte inferior de los bolsos de mano de Prada.

Otro acto significativo de vandalismo se llevó a cabo en Prada Marfa en marzo del 2014, esta vez por un artista que realizó el acto como una obra de arte por sí misma. Lee este artículo de la revista Texas Monthly para más información sobre el incidente del 2014.

Debido a los actos posteriores de vandalismo, se han llevado a cabo reparaciones y renovaciones adicionales y continuas en Prada Marfa. La realidad de poder mantener la obra completamente intacta es un tema complicado y multifacético. El sitio está lejos de ser prístino, como los visitantes ya sabrán; sin embargo, todos los involucrados se dieron cuenta de que, si dejaran que la estructura se pudriera completamente, se convertiría en un peligro y un espectáculo desagradable. Con la aprobación de Elmgreen y Dragset, el plan de la obra original se modificó poco tiempo después de que se construyera en el 2005.

Como Prada Marfa es un establecimiento público, la ley exige que el APF y Ballroom realicen ciertas reparaciones en beneficio de la seguridad. Aún con este mantenimiento mínimo, que permite mantener la instalación abierta al público, el proyecto sigue siendo fiel al espíritu de la propuesta original de Elmgreen y Dragset.

Además de nuestros esfuerzos para realizar el mantenimiento del sitio, organizamos limpiezas trimestrales del tramo de 3.2 kilómetros de la carretera US 90 adyacente al sitio de Prada Marfa como parte del programa de adopción de carreteras del Departamento de Transporte de Texas. Como lo vimos después de la desfiguración de la instalación en el 2014, los residentes de Valentine también limpian, de manera voluntaria, los desechos que dejan los visitantes en un esfuerzo por proteger el sitio.